Por lo que se ve, es verdad eso que dicen de que el tiempo cambia las cosas. Al igual que tu vida puede cambiar totalmente en un instante, cómo cuando te enamoras o cuando tienes un accidente de tráfico, tu vida también puede ir cambiando poquito a poquito, detalle a detalle, sin que apenas te des cuenta, hasta que un día lo que parecía estar al derechas termina del revés. Entonces, cuando observas cómo todo ha ido cambiando sin avisarte y sin pedirte consejo ni opinión alguna, te ves derrotada ante lo que un día era tu vida y gobernabas tú. Es como si tu propio ejército, al que creías tener controlado, te diese la espalda y de repente luchase contra ti mientras tú estás desarmada. Sí, es injusto, pero así es la vida. De repente te ves entre la espada y la pared.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Arriesgarme, sentir de nuevo, mirar hacia el futuro. No temerle al amor. Al sentimiento mas bonito que existe. Arriesgarme y confiar en que todo puede salir bien, aunque sea una vez. En que no todas las personas se bañan en dolor. Mirarte, y saber que no me estoy equivocando. Que esto tiene que salir bien. Que no quiero un siempre, quiero un principio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario