Por lo que se ve, es verdad eso que dicen de que el tiempo cambia las cosas. Al igual que tu vida puede cambiar totalmente en un instante, cómo cuando te enamoras o cuando tienes un accidente de tráfico, tu vida también puede ir cambiando poquito a poquito, detalle a detalle, sin que apenas te des cuenta, hasta que un día lo que parecía estar al derechas termina del revés. Entonces, cuando observas cómo todo ha ido cambiando sin avisarte y sin pedirte consejo ni opinión alguna, te ves derrotada ante lo que un día era tu vida y gobernabas tú. Es como si tu propio ejército, al que creías tener controlado, te diese la espalda y de repente luchase contra ti mientras tú estás desarmada. Sí, es injusto, pero así es la vida. De repente te ves entre la espada y la pared.

jueves, 30 de agosto de 2012

Que tú y yo vamos a comernos el mundo. Que tú y yo vamos a escribir nuestra historia en un libro infinito, sin final, sin epílogo.Que tú y yo vamos a llenar cientos de álbumes de fotos, con cientos de sonrisas, infinitos besos. Aquí y allí. De aquí a París. Y de París a las estrellas. A las estrellas desde el paraíso de tu cama. Que tú y yo somos dos, pero cuando estamos juntos somos un solo ser. Una sola sonrisa, un solo corazón. Que tú y yo vamos a hacer de nuestras cosas una colección de recuerdos y memorias. Nuestras bromas, nuestros secretos. Que tú y yo vamos a coleccionar besos, momentos, caricias.

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