Por lo que se ve, es verdad eso que dicen de que el tiempo cambia las cosas. Al igual que tu vida puede cambiar totalmente en un instante, cómo cuando te enamoras o cuando tienes un accidente de tráfico, tu vida también puede ir cambiando poquito a poquito, detalle a detalle, sin que apenas te des cuenta, hasta que un día lo que parecía estar al derechas termina del revés. Entonces, cuando observas cómo todo ha ido cambiando sin avisarte y sin pedirte consejo ni opinión alguna, te ves derrotada ante lo que un día era tu vida y gobernabas tú. Es como si tu propio ejército, al que creías tener controlado, te diese la espalda y de repente luchase contra ti mientras tú estás desarmada. Sí, es injusto, pero así es la vida. De repente te ves entre la espada y la pared.

viernes, 1 de noviembre de 2013

En ese instante, en ese preciso instante entendi el significado de la felicidad, entendi que se encontraba atrapada en un lugar llamado tatami, recuerdo que era frio y que andabamos descalzos, segun lo que tocara llevabamos un uniforme llamado kimono y en otros llevabamos ropa de deporte y cubridos por unas protecciones, el objetivo estaba en sacar todo lo que tenias dentro de ti, pero aprendiendo tecnicas, golpes que te hicieran avanzar, recuerdo que aquel dia perdi el miedo, por completo, y desde entonces he entendido la palabra soñar, lo que significa felicidad, y lo que significa aspirar a más, empece a creer en mi misma, empece a crecer como persona y como luchadora, pelee por primera vez recuerdo salir al tatami y que mi equipo aclamara mi nombre, recuerdo mis ganas de darlo todo, desde entonces nunca he renunciado a dar un poquito mas de mi, al contrario seguia, no podia parar, y cuando estaba realmente jodida era mi unico lugar donde aislarme, era ese rinoncito donde podia chillar sin hablar, sin que nadie dijera nada, y mañana me enfrento a un reto mas, lleno de miedos que superar, lleno de nervios, lleno de inseguridades a las que enfrentarme pero sabeis? lo que hago con unas ganas y una ilusion que desconocia por completo, sí, he renunciado a muchas cosas, a tardes de tranquilidad, a tardes de amigos, a comidas familiares, a fiestas, a momentos adolescentes, renuncie por entrenos, por competiciones, por preparaciones fisicas, por sentirme mejor y escalar un poquito mas, y sé que no quiero parar, que quiero seguir, que he encontrado el lugar en el mundo en el cual quedarme...

No hay comentarios:

Publicar un comentario